Vidalón explicó que la Granja Porcón no se habría logrado este éxito si es que el líder que lo conduce no hubiese estado bien formado, en términos de conocimiento y con una sólida base moral. “Se requiere de un liderazgo integral, que la comunidad esté informada de lo que se piensan hacer, que haya planes, indicadores y que todos nos comprometamos, porque el tema educativo te permite consolidar propuestas para que la próxima generación alcance mayores metas, sin conflictos, sin violencia, porque ésta nunca ha sido un camino adecuado para alcanzar el desarrollo”, apuntó.

“Lo trascendente en Cajamarca es que, si esto lo llevamos a cabo pronto, va a convertirse en un modelo educativo en las comunidades, para que otras digan sigamos ese camino. Ahí vamos a garantizar en los próximos años que no haya un solo Porcón, sino varios porcones exitosos. Cuando uno tiene una base de educación sólida, permite que cuando se llegue a la universidad se genere conocimiento. Cuando tienes una base económica lo puedes subvencionar. La universidad pública recibe un porcentaje del canon y de las regalías”, resaltó.